INDEC vuelve a informar pobreza luego de años de manipulación

Cabe recordar que, debido a la manipulación de las estadísticas de precios del INDEC a partir de 2007, el índice de pobreza oficial cayó rotundamente en descrédito con el correr de los años. Dada la trayectoria de los ingresos de la población, la subestimación sistemática del aumento generalizado de los precios implicó, lógicamente, una subestimación de la línea debajo de la cual una persona era, considerada, pobre. De ahí que la proporción de argentinos debajo de la línea de pobreza haya alcanzado el 4,7% en el primer semestre de 2013 (última publicación del índice) cuando diversos estudios privados la ubicaban, de manera unánime, por encima del 25%.

En la última semana, el organismo dirigido por Jorge Todesca reveló que, dada una canasta básica de $12.851 y una canasta básica alimentaria de $4.930, la tasa de pobreza se ubicó en 32,2% y la de indigencia en 6,3% en el segundo trimestre de 2016. En términos simples, uno de cada tres argentinos se encuentra actualmente debajo de la línea de la pobreza y casi el 20% de esta subpoblación detenta el carácter de indigente.

Pobreza e indigencia en Argentina. 2Trimestre 2016


La elevadísima tasa de pobreza se vuelve aún más impactante cuando se la proyecta a la cantidad de habitantes del país. En este sentido, 8.772.000 de argentinos habitan en hogares con ingresos menores a la canasta básica y 1.705.000 viven en condiciones de indigencia.

Quizás, el dato más desolador del informe oficial sea el referido a la incidencia de la pobreza en la población infantil: el 47,4% de los niños menores de 14 años es pobre y casi el 10% habita en un hogar con ingresos inferiores a la canasta básica alimentaria. En contrapartida, la población de más de 65 años exhibe una tasa de pobreza del 8,0%. Este guarismo es marcadamente inferior a la media nacional gracias al rol que jugaron conjuntamente la amplia cobertura previsional y la Ley de Movilidad Jubilatoria.

En términos regionales, las zonas más golpeadas por la pobreza son el Noreste (40,1%), el Noroeste (35,8%) y Cuyo (35,6%). En el otro extremo, la región patagónica es la zona del país donde existe una menor tasa de pobreza (24,7%). En cuanto a la indigencia, resalta la tasa exhibida por la región pampeana (7,7%) y el Noreste argentino (7,6%).

Si bien estas cifras ilustran la compleja situación en la que vive más de un tercio de la población, no deben dejar de destacarse las bondades de un sistema nacional de estadísticas verdaderamente confiable. Un diagnóstico correcto y preciso sobre un problema tan complejo como lo es la pobreza se vuelve una condición sine qua non para el diseño de políticas destinadas a erradicar este mal que tanto daño nos hace.

Cuadro resumen



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