Análisis
Alimentos y bebidas
27/01/2014Alimentos y bebidas: tras la caída de 2013, se aguarda un leve repunte

Coordinadora de Análisis Sectorial
El fuerte avance de la molienda, que crecería un 12%, sumado al mejora de 2,7% de la producción de lácteos, serán los grandes dinamizadores del sector. Por su parte, la desaceleración en la producción de carnes rojas y un mal desempeño del rubro bebidas acotarán el crecimiento.
Para este año se aguarda un avance de 1,8% para la industria de alimentos y bebidas, recuperando lo perdido en 2013. La suba estaría traccionada por la producción de lácteos y por una mejora en la molienda.
Con respecto a la molienda de trigo, se espera un incremento en torno a 5%, impulsado por un aumento en la producción del cereal y por la baja base de comparación. Mientras que las exportaciones estarán sujetas a lo que suceda con el nivel de producción, el consumo interno y las autorizaciones de parte del gobierno.
La molienda de soja, por su parte, registraría un avance de 12% con respecto a 2013, producto de una campaña 2013/14 estimada en 53 millones de toneladas. La fuerte devaluación que tuvo lugar en enero debería incentivar a los productores a liquidar stocks, en un contexto de elevada cotización de la oleaginosa en el corto plazo y de aumento en los costos de la cosecha. Hacia mediados de año se prevé una leve tendencia del precio de la soja a la baja, pero se mantendrá en niveles históricos elevados. Desde el punto de vista de la demanda internacional, se espera que China y los países asiáticos en general continúen traccionando la demanda, tanto de aceite como de harina.
Para los lácteos se prevé un avance de 2,7%, gracias al sostenimiento de los precios internacionales en valores elevados y a una baja base de comparación durante el primer semestre. Las principales empresas continúan en la búsqueda de nuevos destinos, en general apuntando a los países asiáticos. La demanda de China se mantendría firme, aunque se verá en parte contrarrestada por el incremento esperado para la producción de Nueva Zelanda en el ciclo 2013/14.
Por otra parte, la desaceleración en la producción de carnes rojas y un mal desempeño del rubro bebidas acotarán el crecimiento del sector. Se estima que en 2014 la faena bovina se incrementará en un 4% (versus un avance de 11,2% en 2013). La mayor faena de hembras y un incremento en la mortandad de terneros habrían llevado en 2013 a una reducción del stock vacuno de cerca de un millón de cabezas, lo que generará una desaceleración de la oferta de ganado para 2014. Así, la producción de carne vacuna avanzaría este año sólo un 1,4%, contra un crecimiento de 9,1% el año previo.
En cuanto a la industria de bebidas, se aguarda un nuevo retroceso de 1,7% con respecto al 2013, en línea con la baja esperada en la actividad económica. La categoría menos afectada sería la de gaseosas, mientras que las cervezas reducirían el ritmo de la caída, dado que en 2013 ya experimentaron una merma en el consumo. En el caso del vino, una fuerte baja esperada en la cosecha de uvas (que comienza en marzo) repercutirá sobre la producción.