Análisis
Perspectivas sectoriales
30/03/2015Por decimonoveno mes consecutivo, la industria se contrae

Coordinadora de Análisis Sectorial
El pasado mes de febrero representó la decimonovena contracción anual consecutiva para la industria, que en el primer bimestre del año acumula una baja de 2,1% anual. Para todo 2015, esperamos que se mantenga la tendencia negativa, aunque moderándose hasta marcar una baja de 0,5%. La actividad industrial continuará afectada por el atraso cambiario, las restricciones para importar bienes intermedios, la caída de los precios de los commodities, y una débil demanda interna y externa.
El pasado mes de febrero la industria retrocedió 2,1% interanual, lo que representa la decimonovena contracción anual consecutiva, según los datos oficiales del INDEC. Así, en el primer bimestre del año, la producción industrial acumuló una baja de igual magnitud.
Los rubros que cayeron con más fuerza fueron los vehículos automotores (20,8% interanual), y los productos textiles (12,1%). También mostraron variaciones negativas las sustancias y productos químicos y las industrias metálicas básicas, ambas con caídas de 2,1% interanual. Los que mostraron variaciones positivas fueron la metalmecánica (8,2%) y los minerales no metálicos (6,7%). El rubro alimentos y bebidas, el de mayor peso en el indicador industrial del INDEC, registró una leve contracción de 0,3% anual.
Para todo 2015, esperamos que se mantenga la tendencia negativa, aunque moderándose hasta marcar una baja de 0,5%. Esta perspectiva responde a un contexto de atraso cambiario y restricciones para importar bienes intermedios, a lo que se suma la caída de los precios internacionales de los principales commodities exportables.
Por el lado de la demanda, vemos un consumo estancado, principalmente porque los salarios en términos reales no recuperarán el terreno perdido en 2014 y el mercado laboral se mostrará poco dinámico. En este marco, si bien los planes de estímulo impulsados por el gobierno (como el “Ahora 12” o los recientemente anunciados descuentos con la tarjeta SUBE y el plan “Renovar”) podrían servir de ayuda, no podrán revertir la tendencia. Por otro lado, la mala performance de la economía brasileña, para la que se prevé una contracción de 0,7%, tampoco ayudará a empujar las exportaciones industriales.
Análisis de las principales ramas
Automotriz:
La producción automotriz cayó 22% en 2014, cerrando un año negro debido principalmente al derrumbe de las ventas internas, la caída de la demanda de Brasil y las restricciones en el acceso a las divisas. Esta tendencia continuó en los primeros meses de 2015: enero mostró una contracción interanual de 28,6%, mientras que en febrero la merma fue de 14,9%.
Sin embargo, hacia adelante hay motivos que vislumbran una mejora que amortiguará la caída. En este sentido, debe destacarse el acuerdo entre gobierno y terminales para aumentar el cupo de dólares para importar. La mayor asignación de divisas para el sector daría lugar a cierta recuperación de las ventas en los próximos meses. Si bien los nuevos cupos no alcanzarían para igualar los niveles de mercado del año pasado, sí deberían permitir al menos mantener niveles de producción y ventas por encima de las 600 mil unidades y dar mayor seguridad en los puestos de trabajo.
En este marco, esperamos una caída de las ventas del orden del 10%, y una merma menor de la producción, en torno al 1,5%, gracias a que se espera un incremento en el market share de los vehículos nacionales.
Alimentos y Bebidas:
En el primer bimestre del año la producción de alimentos y bebidas se redujo 0,3% en comparación con los dos primeros meses de 2014.
En la apertura por subrubros se observa un incremento en las carnes blancas y rojas, y en la molienda de cereales y oleaginosas. La suba en la producción de carnes blancas se explica principalmente por el abaratamiento relativo de la carne aviar respecto de la carne bovina, lo que ha alimentado su consumo interno. En enero, el consumo de pollo aumentó 12,4%, a 41,5 kg. por habitante por año.
Sin embargo, a la luz de otros indicadores, resulta llamativo el crecimiento de los otros dos rubros. La producción de carne bovina cayó un 1,0% en enero. Por su parte, la molienda de trigo acumula a febrero una merma de 1,1%, mientras que la de soja cayó 9,0% en enero.
Para lo que queda del año, esperábamos un avance menor al 1,0%. No obstante, habrá que estar atentos a la evolución de la molienda ya que, si bien se prevén nuevamente una cosecha récord de soja (57 millones de toneladas), el atraso cambiario puede continuar impactando en una mayor retención de grano por parte del productor primario. A su vez, las restricciones a la exportación también representan una traba para la molienda de trigo.
Textil, químicos y minerales no metálicos:
La industria textil se contrajo 12,1% en los dos primeros meses del año. La merma estuvo determinada por la contracción de 10,2% de los hilados de algodón y de 12,5% de los tejidos, bajas que no fueron contrarrestadas por el aumento de 3,5% en las fibras sintéticas.
Por su parte, los productos químicos mostraron una retracción de 2,1% en los primeros dos meses del año. La merma estuvo explicada por el retroceso de 10,3% de los agroquímicos y de 6,8% de los detergentes, jabones y productos personales, que no pudieron ser compensados por el incremento en la producción de gases industriales y productos farmacéuticos.
Finalmente, los minerales no metálicos mostraron un aumento de 6,7% en enero y febrero respecto del año anterior. Entre estos, el rubro que más creció fue vidrio, un 12,8%, mientras que el cemento lo hizo en 7,5%. Este incremento coincide con la suba registrada por los despachos de cemento Portland, que en el primer bimestre crecieron 6,2% anual.