Análisis
Lácteos
09/01/2015La industria láctea, complicada por la baja rentabilidad y la caída de los precios internacionales
El sector lechero no logra revertir la tendencia negativa de la producción. Los bajos precios pagados al productor afectan la rentabilidad de los eslabones base de la cadena y desincentivan la inversión. Al mismo tiempo, a las restricciones a la exportación y el retroceso de las ventas a Argelia y China se suma la caída de los precios internacionales, que puede dañar el desempeño a futuro.
El precio pagado al productor continúa por debajo de los costos
A partir de una muestra realizada por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, se estima que la recepción de leche en la industria acumuló a octubre un total de 5.829 millones de litros, un 3,8% menos que en 2013.
La escasa rentabilidad del sector debido a los bajos precios pagados al productor, y las malas condiciones climáticas (exceso de lluvias), han afectado negativamente la producción.
El precio promedio pagado al productor se ubicó a principios de diciembre en alrededor de ARS 3,19 por litro, lo que representa un incremento interanual de 45%. Por su parte, los costos de producción mostraron una suba menor (de 28,6% interanual), pero aun así se ubican por encima de lo que recibe el productor dado que resultan de ARS 3,26 por litro. Esta situación ha desincentivado la inversión, explicando el estancamiento de la producción que se observa desde 2012.
En un intento por paliar esta situación, el Ministerio de Agricultura y el Banco Nación entregarán líneas de financiación para tambos con ventas menores a los ARS 300 mil mensuales, a una tasa de 17,5% anual por tres años (luego BADLAR + 3 PP) en el caso de crédito para inversiones, y del 23,0% para capital de trabajo. El Ministerio bonificará 4 puntos porcentuales anuales a las solicitudes elegibles.
Las cotizaciones internacionales acentúan su caída, impactando en los ingresos de la industria
Mientras tanto, en el período enero-octubre de 2014 la exportación de leche en polvo se redujo un 15,9% en cantidades, con una caída de casi 33,0% en los últimos cinco meses debido principalmente a las restricciones a la exportación y las dificultades para vender leche en polvo en un mercado internacional con exceso de oferta. Así, se observa un fuerte retroceso en las ventas a Argelia y China. En ambos casos los envíos de leche en polvo se habían incrementado sensiblemente hasta el mes de mayo, pero a partir de entonces muestran una significativa reducción.
En dólares, la caída en las exportaciones es bastante menor, de 3,5%. Sin embargo, esto se debe únicamente al elevado precio de exportación del que se benefició la industria a principios de año. Este normalmente sigue la evolución de la cotización internacional con un retraso de unos tres meses, por lo que se espera que en el futuro cercano se vea negativamente afectado por el derrumbe de los precios internacionales. Entre abril y noviembre, estos cayeron un 42% en el mercado europeo y un 40% en Oceanía, empujados por la mayor producción global y la restricción impuesta por Rusia a la importación de alimentos europeos. Estas restricciones provocaron que muchos productores del viejo continente se volcaran a la producción de leche en polvo, llevando a un exceso de oferta aún mayor en el mercado mundial.
En una nota positiva, en sintonía con lo que sucedió en otros sectores exportadores de nuestro país, las restricciones aplicadas por el gobierno ruso permitieron que las exportaciones argentinas de productos lácteos a Rusia muestren un incremento en dólares cercano al 38% interanual en los primeros diez meses del año.
Sin embargo, con una caída de la actividad interna y dificultades para exportar lo más probable es que la producción de leche vuelva a reducirse en 2015. A su vez, los menores precios podrían afectar la rentabilidad de toda la cadena, ya que podrían impulsar una nueva baja en los (ya deprimidos) precios pagados al productor.