La negociación con Repsol: Una nueva señal de acercamiento a los mercados internacionales
El principio de acuerdo entre el Estado Nacional y Repsol se suma a medidas como el pago de los juicios en el CIADI, la construcción de un IPC bajo auditoría del FMI y la negociación con los holdouts como parte de una estrategia más amplia de reinserción en los mercados financieros internacionales, que surge ante la necesidad de incrementar las fuentes de ingresos de divisas para el año próximo.
La realidad se impone y obliga a avanzar en la dirección correcta
El anuncio del posible acuerdo con Repsol por la expropiación de YPF es de hecho una buena noticia. Más allá de los motivos que impulsan al gobierno a intentar arreglar un conflicto que lleva ya 19 meses, el resultado final contribuiría a otorgar algunos grados más de libertad al gobierno para avanzar con acuerdos para explotar “Vaca Muerta”, daría una señal a inversores extranjeros y sobre todo se alinea con una estrategia mayor tendiente a resolver los conflictos internacionales que impiden al país el acceso a fuentes de financiamiento externo que se vuelven cada vez más necesarias.
Retorno de Cristina: ¿cambios para que nada cambie?
Mantenemos nuestro escenario base, que supone que el Gobierno, obligado por los eventos más que por convencimiento, realizaría correcciones que permitirían a la economía mantenerse en un “equilibrio malo pero no disruptivo” en los próximos dos años. Esto significa que las autoridades ajustarían las tarifas energéticas para recuperar capacidad fiscal y reducir el déficit externo, al tiempo que se mantendría la intención de acercarse a los mercados financieros internacionales, con el objetivo de ganarle tiempo a la restricción externa a través de la obtención de nuevos fondos.
Una década de declinación productiva en el sector de Hidrocarburos
Desde el año 2000 hasta ahora, la Argentina entró en una etapa de declinación productiva en materia de hidrocarburos. En el caso del gas, luego de haber alcanzando un pico de producción histórico en 2004, la producción evidenció una caída pronunciada y constante. En nueve años se produjo 8 mil millones de metros cúbicos menos, lo que implica una contracción de la oferta del 15%. Por su parte, este año se confirmará una caída en las reservas petroleras de 20,8% con relación al pico de 1999.