Análisis
Una distensión que no alcanza | Comercio Exterior
26/04/2013Los temas de la agenda bilateral Argentina-Brasil siguen pendientes

Director
El encuentro sirvió para traer un poco de aire fresco al enrarecido clima actual de las relaciones. Pero quizás su único resultado sea la convocatoria a una reunión posterior de los cuadros técnicos. En el tema de Vale se nota que el interés de Brasil es una salida ordenada de la empresa y, el de Argentina, es que se sostenga el salario de los trabajadores por algunos meses más.
Tal como esperábamos, producto del análisis del bajo nivel en el que se encuentran las relaciones entre Brasil y Argentina, la reunión entre las presidentes Dilma Rousseff y Cristina Kirchner no tuvo resultados concretos en cuanto a la solución de los temas pendientes tanto a nivel del comercio como de los negocios bilaterales.
Sobre el punto que más expectativa había creado en la previa de la reunión, que era la discusión sobre el caso de la minera Vale, no hubo definiciones. Del lado brasileño se llamó al diálogo entre las partes para lograr lo que Dilma Rousseff llamó “el mejor acuerdo posible”, por lo que abogó por una salida ordenada de la empresa. Mientras que del lado Argentino el ministro De Vido insistió con la idea del Gobierno es que Vale retome el proyecto, aunque claramente los últimos movimientos apuntan a acordar que la empresa sostenga los salarios de los empleados por algunos meses más.
En cuanto a las diferencias por el comercio administrado que hace Argentina en forma unilateral, la percepción es que faltan muchas más reuniones técnicas para llegar a puntos de acuerdo. De hecho, es quizás en este sentido donde se puede vislumbrar algún fruto del encuentro. La convocatoria a una reunión posterior de los cuadros técnicos, que se realizaría en Montevideo en las próximas semanas, es un nuevo impulso hacia la normalización de las relaciones comerciales, pero nada puede preverse aún de sus resultados.
Quizás hubo algunos avances para acuerdos puntuales en materias de cupos de ingresos para alimentos argentinos en el mercado brasileño, lo que generaría beneficios en algunas de nuestras economías regionales. Pero claramente esto no era el centro de interés del encuentro.
En definitiva, la reunión sirvió para traer un poco de aire fresco al enrarecido clima actual de las relaciones. Sirvió para liberar algunas tensiones. Sin embargo, en lo que respecta a la agenda de los temas pendientes, sigue estando todo por hacer.